Música se escribe con "M" de Memphis

   Hola a todos de nuevo.

  Sí amigos, porque si en San Luis disfrutamos de música en vivo y gozamos como enanos con el Soul y el Blues, Memphis, ha sido verdaderamente, una orgía de sonidos.
  La ciudad recibe su nombre de la capital del antiguo Egipto, y posee una cierta cualidad ruinosa al estilo barroco que resulta a la vez triste y seductora, como el propio Blues. Las mansiones victorianas se yerguen junto a chabolas medio derruidas. El espíritu salvaje de Memphis se revela a aquellos que están dispuestos a mirar y a escuchar. Aquí se encuentran los museos más extraños y los garitos más increíbles del país.

  Al ser el hogar de los pueblos nativos del Mississipi, al igual que San Luis y Nueva Orleans, el Soul y el Blues corren por las venas de sus habitantes, como corren por las nuestras las ganas de sentir ese espíritu que la convirtió en la capital mundial del Rock y la música negra

  Para empezar nuestro periplo visitamos Graceland. Elvis Presley compró esta mansión de estilo colonial por 100.000$ cuando sólo contaba con 22 años. El dudoso gusto de Elvis impregna todas las dependencias y en los terrenos aledaños a la casa se pueden visitar tanto su museo de coches como sus dos aviones privados.

                         

  La memoria del cantante se ha convertido en un santuario donde miles de seguidores del Rey vienen a rendir homenaje a sus restos que descansan junto a la piscina trasera de esta masificada atracción turística.

 También visitamos los Sun Studios, donde descubrieron el potencial de Elvis y punto cero del sonido Rock ́n ́Roll americano. Aquí pudimos escuchar algunas grabaciones originales de Elvis, BB. King, Johnny Cash o Roy Orbison.

  Nuestro visita a los orígenes del Soul continuó por el Stax Museum, que se ubica donde se hallaban los antiguos estudios de grabación del mismo nombre. Este lugar fue el autentico epicentro de la música Soul en los años sesenta. Donde, entre otros, Otis Redding, Booker T and the MG ́s o Wilson Pickett grabaron sus discos.

  Animados por tanto lujo que invadía nuestros ojos y oídos y tras descansar un rato en un motel de carretera, nos fuimos a Beale Street, donde nos esperaban los mejores garitos de Blues de este lado del Mississipi.

  

  La música inunda las calles y grupos de todo tipo surgen en cualquier esquina, en cualquier bar. Entre otros muchos por los que estuvimos y dimos buena cuenta de los helados manjares de nuestro Patrocinador Oficial, disfrutamos en el B.B. King's Blues Club, donde la King Bezz logró que moviéramos hasta la extenuación nuestros agotados cuerpos.

  Cuando la presencia policial empezó a ser masiva, coincidiendo con el cierre de los garitos, huimos a descansar a nuestro motel.

  A la mañana siguiente, antes de abandonar Menphis camino de Tulsa, y como era el día del Señor, presenciamos una misa Gospel en la FULL GOSPEL TABERNACLE CHURCH, donde la leyenda de la música Soul, Al Green, convertido en reverendo preside un potente coro.
  Tras pasar los primeros momentos de corte, contribuimos a la celebración con un sin fin de “OHH MEN” Y “ALELUYAS”.

  Música en estado puro desde los restaurantes, hasta los bares, museos, calles e iglesias. La música eterna de Memphis.


   C&A (+J)