martes, 15 de noviembre de 2011

New York, New York

  Buenas a todos de nuevo

  Seguimos pateando la Gran Manzana de norte a sur y de este a oeste. Estos días han tenido un marcado carácter cultural al visitar dos grandes museos y la Public Library. 
  El primer museo en pasar por nuestras ávidas miradas ha sido el MOMA del que no hay que perderse la última planta. "Las señoritas de Avignon" de Picasso y "Noche estrellada" de Van Gogh son las grandes atracciones de una colección permanente en la que destacan también lienzos de Miró, Gauguin, Matisse, Cézanne, Klint, Modigliani y por supuesto el Pop Art con Andy Warhol como máximo exponente.




  Al día siguiente, tras pasear por la ciudad y seguir contemplando la variedad de rascacielos y edificios que te obligan a estar permanentemente con la mirada puesta en el cielo, nos dirigimos al Metropolitan Museum of Art. 









  El Metropolitan es uno de los más variados y mejores museos del mundo con sus colecciones permanentes sobre arte egipcio, arte medieval, tesoros precolombinos, escultura europea, arte griego y romano o arte islámico. 



















  La sala que contiene el templo egipcio de Dendur recibe la luz de las grandes cristaleras que dan a Central Park.




  Sus salas de arte moderno y de grandes pintores europeos nos dejó la posibilidad de volver a disfrutar de artistas como Dalí, Picasso, Van Gogh, Munch, Manet, Monet, Degas, Renoir, Juan Gris, Sorolla y un largo etcétera que llegó el punto de dejar nuestros sentidos prácticamente colapsados.











  El viernes por la noche cenamos en el "Zebra Room" la trastienda del Lenox Lounge, uno de los locales más conocidos de Harlem donde tocaron Miles Davis, John Coltrane, y donde tenía siempre una mesa reservada Billie Holyday. 




  Allí pudimos disfrutar de un trío excepcional de músicos. Unos auténticos virtuosos que rondaban los cincuenta años de edad capitaneados por el fabuloso pianista Roy Meriwether, en la batería Sir G. Earl Griss, un negro delgado de manos y movimientos ágiles, perfectamente trajeado y con una sonrisa permanente en el rostro y Paul Rambsy en el bajo. Increíble el suave deslizar de esas manos negras de yemas rosadas volando por los trastes acariciando apenas el mástil de su instrumento y extrayendo los sonidos más hermosos.



  La mañana del sábado la ocupamos en acercarnos al mercado que se monta tres días a la semana en Union Square. Granjeros y agricultores de todo el estado y de algunos estados vecinos se dan cita para vender sus coloristas productos entre una gran cantidad de gente que disfruta de la soleada mañana otoñal. Desde flores y frutas hasta huevos ecológicos pasando por tomates, cebollas, patatas, quesos, pasteles, pimientos, panes, tartas, vinos, mermeladas en una orgía de colores y aromas que deleitaban los sentidos. 

















  Tomamos un té helado de menta endulzado con jarabe de arce que estaba delicioso y compramos varios productos para prepararnos una fantástica ensalada.







  Aprovechamos la tarde para acercarnos a la Biblioteca Pública de Nueva York donde tantas películas se han rodado y caminamos hasta la estación Grand Central para obtener una de las mejores vistas del edificio Chrysler que es sin duda nuestro favorito de todo el skyline neoyorquino.






  Nuestros pasos nos llevaron por la 42 St. acercándonos al Bryant Park donde han instalado ya una pista de patinaje sobre hielo que estaba a rebosar de gente. 











 Los puestos del parque comienzan a mostrar los primeros adornos de Navidad y en el ambiente ya se puede respirar el espíritu navideño que pronto lo impregnará todo.
  Nuestra llegada a Times Square, ya físicamente hechos fosfatina, nos dejó aturrullados ante la ingente cantidad de personas que se apelotonaban por todas partes. 














  Entre codazos, empujones, coches, policías, taxis amarillos y letreros luminosos ciclópeos decidimos coger el metro que nos llevaba de vuelta a la tranquilidad de nuestro hogar.

  Un beso a todos

  C&A

3 comentarios:

  1. Fantástico!! que grande es todo en EEUU, cocacolas, coches, gentes, policias, edificios, parques, museos.......¿qué tienen otro sistema métrico para medir las cosas? Está claro que el metro que utilizan es muy diferente al nuestro, por cada centímetro nuestro es un metro suyo!! En finn.... alguna ventaja tendrá ser pequeñito.
    Aixxsss cuando veo esos club de jazz, los dientes se me afilan de envidia...
    Cuidaros
    Bss

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  2. ahhhh!!! Time Square ....genial "this is america!!"

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